¿Por qué deberías experimentar con el diseño de tus salones de clase?
Importancia del diseño y la decoración de las aulas
¿Nos hemos preguntado si nuestras aulas son placenteras para nuestros alumnos?
Y no me refiero a si el pupitre es cómodo o si el salón cuenta con un aire acondicionado, me refiero a si el espacio motiva el aprendizaje e incentiva la imaginación y el pensamiento creativo.
La mayoría de las personas guardamos buenos recuerdos de nuestra etapa en el kínder o el preescolar; esto se debe a que las aulas en esos primeros niveles educativos suelen ser mucho más lúdicas y coloridas.
Desafortunadamente, cuando el alumno crece, los colegios eliminan todos los estímulos del salón de clases y es entonces cuando el aprendizaje comienza a perder significación.
Los espacios son parte importante de la experiencia del alumno, es por ello que los colegios deberían trabajarlos más y dejar de diseñar sus aulas como cárceles del pensamiento.
Rosan Bosch es una arquitecta holandesa especializada en diseño de espacios de aprendizaje.
Con más de 25 años de experiencia, Bosch fundó en España un importante estudio de arquitectura y diseño dedicado a renovar colegios de todo el mundo.
En su sitio web https://rosanbosch.com/ explica a detalle el enfoque de su trabajo:
«Las personas están en el centro de nuestros diseños. En nuestros proyectos, analizamos las necesidades y comportamientos de los usuarios para desarrollar soluciones que marcan la diferencia y crean impacto» (Bosch, n.d.).
Algo que destaco del trabajo de Rosan Bosch es la importancia de romper con el concepto tradicional del aula: paredes blancas, pupitres grises y ordenados en fila, pizarra al frente, escritorio y ausencia total de colores y texturas.
¿Cómo influye el diseño de las aulas en la creatividad de los alumnos?
Bosch propone aulas «con colores, materiales, texturas y luz para crear espacios lúdicos que incentivan la creatividad, la imaginación y la innovación» (Bosch, n.d.).
La arquitecta afirma que el paisaje tiene que activar los sentidos de los alumnos, la iluminación debe saber dirigir la atención, mientras que el mobiliario necesita fomentar el trabajo colaborativo y los espacios contribuir al proceso dinámico de aprendizaje.
El diseño de los espacios propuestos por el estudio de Bosch «se basa en 6 principios que conectan situaciones de aprendizaje con el entorno físico». Cada propuesta está relacionada con el nivel de concentración e interacción deseada en el alumno. (Bosch, n.d.).
6 principios del diseño de Rosan Bosch
Cima de la montaña
Espacio pensado para que una persona asuma el rol del docente y comunique sus ideas, puntos de vista y conocimiento al grupo.
Cueva
Son espacios tranquilos diseñados para la concentración o reflexión individual y están pensados para 1 o dos alumnos.
Corro
Espacios para que grupos reducidos se concentren en el diálogo y desarrollen sus habilidades colaborativas.
Manantial
Son espacios informales y de circulación en el que la interrupción puede ser frecuente. Se promueve la convivencia, las sorpresas y la aparición de ideas espontáneas.
Manos a la obra
Son espacios pensados para llevar a la práctica la teoría aprendida en clase. Su finalidad es que el aprendizaje sea más relevante y motivador.
¡Arriba!
Espacios para actividades de juego en los que el movimiento fomenta la integración del grupo y energiza el proceso de aprendizaje.
No todos los colegios están preparados para las propuestas arquitectónicas de Rosan Bosch. Especialmente aquellos cuyo concepto tradicional de Educación no les permite salirse del esquema habitual del aula: considerándola un espacio sacro y carente de estímulos donde el maestro es la única autoridad y, por tanto, debe ser el único foco de atención.
Todos los colegios que han contratado los servicios del estudio de Bosch han logrado experiencias de aprendizaje más significativas y placenteras para sus alumnos, así como una mejor opinión de sus familias.
Los estudiantes que trabajan en aulas creativas disfrutan pasar tiempo dentro de sus colegios, están motivados, entran gustosos a clase, mejoran su aprovechamiento y alcanzan estados de creatividad y concentración elevados.
Innovar es más que rediseñar el aula
Sin embargo, recuerda que la innovación no sólo se limita al rediseño del espacio. De nada nos servirá tener un aula creativa, si nuestro proceso pedagógico sigue siendo obsoleto.
Innovar no es sólo cambiar el espacio, es cambiar nuestra manera de entender el proceso pedagógico, nuestra forma de impartir cátedra y de realizar nuestros procesos administrativos.
A propósito de la pandemia de COVID-19 y del posible regreso a clases presenciales, la teoría de Rosan Bosch sobre la necesidad de espacios amplios y abiertos para el aprendizaje, ha cobrado mayor relevancia que antes.
Tal parece que la nueva normalidad obligará a innovar a todos los colegios, incluidos los que siguen anclados en el pasado.
Referencias
Sitio web oficial de Rosan Bosch: https://rosanbosch.com/